lunes, 8 de octubre de 2007
ESTE MARTES EN CULTURAMA
HOLA A TODOS. ESTE MARTES ESTARÉ EN CULTURAMA DE SEÑAL COLOMBIA HABLANDO SOBRE LA HISTORIA DE LA HISTORIETA EN COLOMBIA. A LAS 9:30 P.M.
martes, 2 de octubre de 2007
TODO TIENE SU FINAL, NADA DURA PARA SIEMPRE
Creo que a mis amigos les dije una vez que los cantantes de los que me hubiera gustado asistir a un concierto ya se murieron. Se murió Pedro Infante, Lennon, Tito Rodriguez, Freddie Mercury, Ray Charles y Héctor Lavoe.
Hector Lavoe hubiera cumplido este 30 de septiembre 61 años, tal vez todavía estaría cantando. Pero no. Lo dejaron morir.
Digo que lo dejaron morir por que algo de la extraña fascinación que me producen esos cantantes muertos es saber las circunstancias de su muerte, que es en últimas lo que los convierte en leyenda.
Pedro Infante murió en un accidente aéreo (Como Richie Valenz y Buddy Holly), en un avión que él piloteaba, ya había tenido un accidente antes por lo cual llevaba una placa de metal en el cráneo. A Lennon lo mató Marc Chapman, su fan más devoto, hacía poco había terminado una entrevista donde decía que esperaba vivir hasta los 80 años, pero vivió solo hasta los años 80. Tito Rodriguez dio su último concierto en el Madison Square Garden de New York en el 73, tenía leucemia, finalizada la presentación se desmayó y tres días después murió. Freddie Mércury murió de Sida, en silencio. Ray Charles murió tranquilamente, al final de una vida tormentosa. Y a Hector Lavoe …lo dejaron morir.
He tenido oportunidad de leer y ver documetales sobre Hector Pérez, Héctor Lavoe, su vida fue triste, su legado fue genial. En la vida de los grandes genios y artistas, si me permiten llamarlo así, subyace el conflicto, Lavoe no fue la excepción. Huérfano de madre a los pocos años de vida, se va muy joven a New York contra la voluntad de su Padre y es absorbido por la música, su pasión; pero el mundo del espectáculo lo deslumbra y las drogas, al igual que a Ray Charles, lo atrapan. Pero Ray Pudo salir.
Pero no solo fueron las drogas, también sus managers. Y me atrevería a preguntar ¿Dónde estaban sus amigos que hoy le rinden tributo? Pero como dice la canción “La Fama”, que él mismo cantaba: “no tengo amigos, y si un amor fácil lo consigo, así de fácil lo he de perder”.
Al final de su vida con la pena de haber perdido a su hijo, después de haber intentado suicidarse, con SIDA, en el abismo de las drogas, sus manejadores lo drogaban más y lo subían al escenario. Al final de sus días, con medio cuerpo paralizado, tuerto, lo subían al escenario para lucrarse con ese despojo de hombre. Que triste.
Muchas de sus letras hablan de esa tristeza profunda, y conociendo su vida se hacen más tristes esas canciones. No se si decirte ¡Feliz cumpleaños Héctor!
Hector Lavoe hubiera cumplido este 30 de septiembre 61 años, tal vez todavía estaría cantando. Pero no. Lo dejaron morir.
Digo que lo dejaron morir por que algo de la extraña fascinación que me producen esos cantantes muertos es saber las circunstancias de su muerte, que es en últimas lo que los convierte en leyenda.
Pedro Infante murió en un accidente aéreo (Como Richie Valenz y Buddy Holly), en un avión que él piloteaba, ya había tenido un accidente antes por lo cual llevaba una placa de metal en el cráneo. A Lennon lo mató Marc Chapman, su fan más devoto, hacía poco había terminado una entrevista donde decía que esperaba vivir hasta los 80 años, pero vivió solo hasta los años 80. Tito Rodriguez dio su último concierto en el Madison Square Garden de New York en el 73, tenía leucemia, finalizada la presentación se desmayó y tres días después murió. Freddie Mércury murió de Sida, en silencio. Ray Charles murió tranquilamente, al final de una vida tormentosa. Y a Hector Lavoe …lo dejaron morir.
He tenido oportunidad de leer y ver documetales sobre Hector Pérez, Héctor Lavoe, su vida fue triste, su legado fue genial. En la vida de los grandes genios y artistas, si me permiten llamarlo así, subyace el conflicto, Lavoe no fue la excepción. Huérfano de madre a los pocos años de vida, se va muy joven a New York contra la voluntad de su Padre y es absorbido por la música, su pasión; pero el mundo del espectáculo lo deslumbra y las drogas, al igual que a Ray Charles, lo atrapan. Pero Ray Pudo salir.
Pero no solo fueron las drogas, también sus managers. Y me atrevería a preguntar ¿Dónde estaban sus amigos que hoy le rinden tributo? Pero como dice la canción “La Fama”, que él mismo cantaba: “no tengo amigos, y si un amor fácil lo consigo, así de fácil lo he de perder”.
Al final de su vida con la pena de haber perdido a su hijo, después de haber intentado suicidarse, con SIDA, en el abismo de las drogas, sus manejadores lo drogaban más y lo subían al escenario. Al final de sus días, con medio cuerpo paralizado, tuerto, lo subían al escenario para lucrarse con ese despojo de hombre. Que triste.
Muchas de sus letras hablan de esa tristeza profunda, y conociendo su vida se hacen más tristes esas canciones. No se si decirte ¡Feliz cumpleaños Héctor!
300 vs 300
En la introducción de la novela gráfica 300, Frank Miller cuenta que de muchacho vio una película llamada “Los 300 espartanos” que recreaba la hazaña del Rey Leonidas frente al ejército de Jerjes por defender el paso de las Termópilas y evitar la invasión a Grecia. Recuerda que era una película hecha a la antigua, como las de romanos, no tan espectacular como Cleopatra o Ben Hur, ni con reparto de lujo como esas; era una producción más bien modesta.
Me gustó la novela gráfica, me gustó la película, y por aquellos giros del destino llegó a mis manos la película que vio Miller. Se llama efectivamente “los 300 espartanos”, la tradujeron al castellano como “los 300 héroes” ó “El León de Esparta”. Averiguando la ficha técnica supe que es del año 1962, su director era Rudolph Maté, y la protagonizó Richard Egan. Una modesta producción desde todo punto de vista menos el argumental. Los efectos no llegan a velar la historia. Un poco lenta si se quiere. En cinemascope. Perfectamente la podrían pasar en Semana Santa en medio de todo ese cine bíblico ya que es un filme políticamente correcto.
Vista desde el hoy la película de Miller es un tributo a esta primera producción. Pero en este caso me decepcioné un poquito con Frank Miller. No por que 300 sea mala. El argumento es prácticamente el mismo y muchos de los diálogos son tomados de la película de Maté, y sobre todo los más punzantes, y yo que creí que eran obra de la creatividad de Miller…
Entre algunos de los que recuerdo están:
· Cuando la esposa le dice a Leonidas que no puede llevarse al ejército sin autorización del consejo, éste responde: “Mi guardia personal (los 300) no necsita aprobación del consejo.”
· Un emisario de Jerjes le dice: “Nuestras flechas ocultarán el sol” y Leonidas responde: “Pues pelearemos a la sombra”
· Finalmente un espía le dice a Leonidas que los ejércitos de Jerjes son tan grandes que se beben los ríos enteros.
A veces es mejor no tener puntos de comparación…
Me gustó la novela gráfica, me gustó la película, y por aquellos giros del destino llegó a mis manos la película que vio Miller. Se llama efectivamente “los 300 espartanos”, la tradujeron al castellano como “los 300 héroes” ó “El León de Esparta”. Averiguando la ficha técnica supe que es del año 1962, su director era Rudolph Maté, y la protagonizó Richard Egan. Una modesta producción desde todo punto de vista menos el argumental. Los efectos no llegan a velar la historia. Un poco lenta si se quiere. En cinemascope. Perfectamente la podrían pasar en Semana Santa en medio de todo ese cine bíblico ya que es un filme políticamente correcto.
Vista desde el hoy la película de Miller es un tributo a esta primera producción. Pero en este caso me decepcioné un poquito con Frank Miller. No por que 300 sea mala. El argumento es prácticamente el mismo y muchos de los diálogos son tomados de la película de Maté, y sobre todo los más punzantes, y yo que creí que eran obra de la creatividad de Miller…
Entre algunos de los que recuerdo están:
· Cuando la esposa le dice a Leonidas que no puede llevarse al ejército sin autorización del consejo, éste responde: “Mi guardia personal (los 300) no necsita aprobación del consejo.”
· Un emisario de Jerjes le dice: “Nuestras flechas ocultarán el sol” y Leonidas responde: “Pues pelearemos a la sombra”
· Finalmente un espía le dice a Leonidas que los ejércitos de Jerjes son tan grandes que se beben los ríos enteros.
A veces es mejor no tener puntos de comparación…
Suscribirse a:
Entradas (Atom)